El pasado 9 de octubre, durante la gala de clausura del Almería Western Film Festival tuve el placer de asistir al estreno de «Parada en el Infierno» (Stop Over in Hell) de Victor Matellano. Era una película que me hacía mucha ilusión ver, pues se trata del primer Western 100% español en décadas, y lo cierto es que no me defraudó, ya que me encontré ante uno de los westerns más sólidos y originales que he visto en los últimos años.
El germen del proyecto surge precisamente durante el AWFF del año 2014, donde se reúnen Víctor Matellano y Juan Gabriel García con la leyenda del Spaghetti Western Enzo G. Castellari, que apoyará la idea desde el principio. Poco después se unirían Antonio Durán, como tercer guionista, y el productor Andrés Acevedo y la aventura rápidamente tomará forma. La película ha sido rodada en inglés en los parajes de Dehesa de Navalvillar de Colmenar Viejo, donde el arquitecto Javier de la Morena ha recreado una auténtica parada de diligencias de la época.

Matellano se aparta en «Parada en el Infierno» de los senderos del cine del oeste clásico, para construir una cruda historia a medio camino entre el terror, el thriller y el western moderno. La película comienza con un puñetazo en la cara, mostrando desde el primer minuto sus cartas, e indicándonos el tono que encontraremos a lo largo de todo el metraje.
«Stop Over in Hell» narra la historia unos forajidos que pretenden hacerse con un cargamento de oro que ha de pasar por una parada de postas de la empresa Black Hell & Co. La banda la forman el Coronel (Pablo Scola), el cruel cabecilla que dirige al grupo con mano de hierro, una mestiza muda (Tábata Cerezo) que ejerce de criada y posiblemente de esclava sexual, el maniaco sexual Red (Maarten Dannenberg), y Cuba (Armando Buika) un fortachón que raya en la deficiencia mental y que colecciona las orejas de sus víctimas.

Para conseguir su objetivo la cuadrilla secuestrará a todos los ocupantes de la parada de diligencias hasta la llegada del cargamento. Así quedaran encerrados en este asfixiante entorno, los trabajadores de la parada Ernest (Denis Rafter) y Chris (Víctor Vidal), y las viajeras Liz (Tania Watson) y Anne (Veki G. Velilla), dos hermanas que van a cumplir la última voluntad de su padre recientemente muerto y que ocultan algún que otro secreto. Muy pronto el horror se cernirá sobre todos ellos, pues la manera de matar el tiempo de estos despiadados personajes es torturar y causar dolor.

Nunca llegamos a saber si estos bandidos son desertores, licenciados o simplemente han robado los uniformes en una de sus fechorías anteriores. Aunque Cuba llega a mencionar en algún momento que hacen lo que hacen porque «la guerra vuelve loca a la gente», no queda claro si esto es cierto o solo forma parte de la distorsionada visión de la realidad de la banda. El director nos ahorra flashbacks innecesarios (Tan habituales en el cine actual), pues no necesitamos saber qué es lo que llevó a los personaje a esta situación, entramos directamente en la historia sin conocer sus motivaciones, y solo vemos como ejercen la violencia de forma mecánica sobre los que les rodean. Según avanza la trama la tensión crecerá por momentos, hasta que la llegada de un nuevo carruaje hará que se precipiten los acontecimientos hacia el climax final.

«Stop Over in Hell» no escatima en escenas violentas, nos encontramos ante un film nihilista que pretende causar desazón en el espectador y que tiene más puntos en común con «Funny Games» que con «Río Bravo», pero sin peder los elementos identificativos que hacen reconocible a cualquier western.
Uno de los grandes aciertos de la cinta es el personaje del Coronel. Bajo la dirección de Matellano, Pablo Scola crea con su magistral interpretación, uno de los personajes más diabólicos, crueles y carismáticos que recuerde en cine del oeste, llegando a superar los niveles de maldad de Chaco (Tomás Milian) en «Los cuatro del apocalipsis» (1975).

Un gran villano que atrapa por su magnetismo y que representa el mal personificado. En segundos pasa de comportarse como un caballero encantador a tener violentos brotes de crueldad. Los actos del Coronel están guiados por una firme ideología, que él mismo ha creado a raíz de pervertir con su esquizofrenia las ideas del filósofo alemán Max Stirner, y que le llevan a recitar la frase «El Estado llama ley a su propia violencia, y a la del individuo crimen. Entonces, que así sea» antes de ejecutar a alguien.
Para terminar de trazar el retrato del personaje, no puedo dejar de mencionar su instrumento preferido para matar, una especie de gancho o arpón, que me retrotrae a las grandes figuras del Giallo o el Slasher, y que convierten al Coronel en un nuevo icono del Weird Western que perdurará en nuestra retina durante mucho tiempo.

El casting se completa con jóvenes valores del nuevo cine español como Nadia de Santiago, junto a artistas consagrados como Manuel Bandera, Ramón Langa, Guillermo Montesinos, o Enzo G. Castellari que interpreta un divertido papel. Incluso se incluye un bonito guiño homenaje al actor Conrado San Martín.
A nivel técnico tenemos una película de un acabado impecable, con un gran diseño de producción que se apoya en la atmosférica fotografía de Daniel Salas Alberola, el estupendo vestuario de Marta Fenollar, o los siempre impactántes efectos especiales de Colin Arthur, el legendario autor detrás de los maquillajes y efectos de “La historia interminable”, “Conan, el bárbaro” o «Amanecer Zulú».

Mención aparte merece la música, tanto la banda sonora de José Ignacio Arrufat (Score) y Javier de la Morena (Canciones) que ambienta y remarca maravillosamente las escenas de tensión, como las canciones de Jack Jamison y Nat Simons, que ponen el contrapunto melódico a la áspera historia, especialmente «Sometimes», la bella balada de Simons que pone el broche final a la cinta.
«Parada en el Infierno» nos enseña que todavía se pueden contar historias nuevas dentro del género del cine del oeste, y que no hay que ceñirse a los clichés del género para realizar un gran Western. Sin duda la mejor película hasta ahora de Victor Matellano y la que marcará el listón de los futuros éxitos del director madrileño.
Tened cuidado si hacéis una parada en este infierno pues el Coronel os perseguirá hasta daros caza…
Si queréis saber más sobre Victor y su obra podéis visitar su web haciendo clic aquí.
La pregunta del millón es:
Llegara a los cines???
Al videoclub????
Donde se podrá ver???
Un saludo y gracias por el articulo.
Ahora mismo la película está en negociaciones para su distribución, esperemos que pronto se proyecte en salas españolas. El DVD saldrá seguro pronto. En cuanto haya noticias informaremos en la web para que estéis al tanto 😉
Gracias por la informacion
De nada! a mandar 😉